Siempre recordaremos con mucho cariño a Andrea y a este intercambio, fuimos 4 días a Rotterdam a visitar a nuestro hijo que estaba estudiando alli.
Además de recibirnos en persona para darnos las llaves de su primera vivienda y explicarnos el funcionamiento de su casa, fue muy amable por su parte irse a dormir a casa de una amiga durante una noche, ya que hasta el dia siguiente de nuestra llegada no salía su vuelo a Florencia.
Le estamos super agradecidos, fue muy atenta con nosotros, nos dejó unos detalles deliciosos y su casa era ideal.